lunes, 16 de septiembre de 2013

Kosovo y Cataluña ¿una misma estrategia?



                                                                               

                       

        La situación crítica por la que atraviesa España va mucho más allá de lo que  nuestros gobernantes y la oposición a estos  señalan. La problemática económica , con lo gravísima que es, palidece si dirigimos  nuestra atención y la comparamos con lo que está aconteciendo en Cataluña.
 Estamos siendo testigos del  desarrollo de un escenario  que muy probablemente desembocará en un conflicto  de dimensiones insospechadas sino se toman las medidas precisas, y eso sino es ya demasiado tarde para hacerlo.
La adormecida, pasiva e irresponsable  población española, incluida por supuesto la catalana, es un actor más  de esta tragedia a la que la inmensa mayoría asiste como  público  indiferente.

El decisivo período histórico del que, querámoslo o no, formamos parte, no es momento para volver la vista atrás y señalar de modo acusatorio cuales han sido los orígenes  que han dado lugar a que España haya llegado al punto en el que se encuentra en estos momentos.
Señalar estos orígenes y circunstancias precipitantes solamente tiene sentido si es para dejar meridianamente clara la falsedad de esos argumentos secesionistas  que mantienen que lo que está ocurriendo no es otra cosa que la consecuencia lógica de expresiones “espontáneas” del pueblo de Cataluña, expresiones que exigen la conformación  de una estructura política propia y diferenciada que de cauce a aspiraciones nacionales  surgidas de modo natural por nadie instigado.
Este señalamiento retrospectivo  también sería valido para extraer enseñanzas que  permitan desarrollar estrategias y tomar medidas que puedan servir para  conjurar el peligro secesionista que enfrentamos.

Con estos dos propósitos nos referiremos a los orígenes de esta situación en la que la Unidad Nacional se encuentra en serio peligro.
El origen de todo este dislate lo encontramos en la Constitución de 1978, en la creación de lo que se  ha dado en llamar “estado autonómico” Constitución que  hablaba de comunidades históricas y sobre todo utilizaba el suicida término de nacionalidades.
Tras la muerte de Franco se pensó que  otorgando  autonomías políticas y transfiriendo  a las “comunidades históricas” competencias que en lógica deberían corresponder al al Estado de la nación se lograría apaciguar los denominados problemas vasco y catalán, todo ello con la lealtad de los dirigentes nacionalistas.
Craso error, la experiencia ha puesto de manifiesto que el efecto ha sido el contrario puesto que  esa estrategia solamente ha servido para enconar aún más las reivindicaciones, primero políticas y más adelante también territoriales y de soberanía de unos entonces minoritarios nacionalistas que se han echado al monte convertidos en secesionistas.

Pero lejos de rectificar, los sucesivos gobiernos, de uno u otro color político, no han hecho otra cosa que profundizar en el error al conceder nuevas transferencias y permitiéndoles infringir la ley, todo esto ha ido alimentando al monstruo secesionista.

Peor si cabe una actuación peor, que ha llevado al paroxismo el nacionalismo-secesionista, ha sido la  concesión de nuevas transferencias en educación siendo ya tres las generaciones vascas y catalanas, en este artículo nos estamos centrando en estas últimas, a las que se le ha inoculado  el odio a España y a todo aquello que pueda sonar a español. Se han servido  del idioma propio como  seña identitaria no sólo diferente sino enfrentándola con  el resto de la Patria Se ha manipulado la historia para que estas generaciones vean  a Cataluña como un país soberano ocupada por España.
De este modo la supuesta espontaneidad de las reivindicaciones nacionalistas y secesionistas pasarían a ser movimientos plenamente dirigidos.
Si a esto le sumamos la inactividad culpable de aquellos obligados a hacer que las leyes se cumplan, como la ley de banderas y todo lo referido al uso del español, y obligar al cumplimiento de las resoluciones de las más altas instancias judiciales referidas al uso y estudio del idioma español en las aulas el coztel explosivo está servido.

El incumplimiento de las obligaciones de los sucesivos gobiernos, de uno y otro signo, de imponer las leyes allí donde estas fuesen violadas y la del monarca y de los Ejércitos de proteger la Unidad Nacional ha llevado a la dramática situación a la que ahora estamos abocados.
El paso más reciente que se dio para  entrar en esta vorágine  que lleva al enfrentamiento social se dio al aprobar el ahora vigente estatuto catalán, ya que se trata realmente de una especie de Constitución de una nación sin Estado, y desde ahí cualquier manipulación es posible, por mucho que el Tribunal Constitucional lo considerase perfectamente ajustado a la Constitución.

                                                                          


Si realmente se quiere enfrentar con éxito  la acometida secesionista es necearlo romper con dos tópicos muy extendidos entre la derecha patriotera, que no patriota, que se opone al independentismo aunque  su razón no sea la defensa  de la Unidad Nacional  por encima de cualquier circunstancia económica, electoral, de mayorías, etc.
El primer equívoco se encuentra en no ver en el independentismo y secesionismo catalán  algo que va más allá de  la mera cuestión económica del “Madrid nos roba” o creer que la base del impresionismo  se basa  en la idea de que como nación independiente tendrán un nivel  de vida más alto y una encomia más saneada.
Otra posición igualmente equivocada deriva de considerar que no ha lugar a la independencia y secesión de Cataluña debido a que los favorables a la secesión carecen de la legitimidad democrática que la mayoría confiere, del mismo modo se refieren a que la secesión  se podría votar pero siempre y cuando en esa votación participase todo el pueblo español y no solamente el catalán.
Pero  todo esto es un error,  a mi modo de ver una traición, puesto que la Unidad de la Nación se estaría dejando de considerar un bien  en si mismo, una realidad metafísica básica de la existencia misma de la Patria  para convertirse en un hecho meramente instrumental dependiente de las leyes y  opiniones de las manipulables masas.
Por la misma razón considero una enorme equivocación  poner como  freno a las ansias secesionistas  el texto constitucional, y más cuando  la Carta Magna puede ser modificada dependiendo de algo tan baladí  como es la voluntad de la mayoría.
Si no hay un convencimiento y conciencia nacional en España, si la unidad de la Patria no es sino una palabra hueca, hasta para nuestros militares, todo está perdido antes siquiera de luchar.

Frente al sentimiento nacional que los secesionistas muestran, de nada sirven  cuestiones económicas o legalismos,

Pero los factores que ahora convergen  en el proceso hacia la secesión de Cataluña son muchos más y mayores  de lo que superficialmente pudiera parecer.

Muchos de los más altos dirigentes de las organizaciones que dirigen el derrotero secesionista que ha emprendido  una gran parte del pueblo catalán se han referido a este actual empeño como el “camino kosovar a la independencia”.
Desde mi punto de vista son muchos los datos que confirman que  esta aseveración se acomoda tristemente a la realidad, y que lo mismo que aconteció en Kosovo en la primera década de este segundo milenio está reproduciéndose en  nuestros días en las tierras de Cataluña.

La federación Convergencia i Unió presidida por el actual presidente de la Generalidad Artur Mas. Ha pasado de una ideología liberal y nacionalista a otra plenamente secesionista, centrando toda su atención en la realización de un referéndum sobre el “derecho a decidir” que según ellos se realizará “si o sí”.
En las anteriores elecciones autonómicas  el partido de Mas perdió nada menos que doce diputados en las cortes  catalanas. Las perdió en pro de ERC (Ezquerra Republicana de Catalunya) que preside  Oriol Junqueras. Mucho nos tememos que en las próximas elecciones catalanas ERC alcanzará la mayoría, quizá absoluta, desbancando a C i U de Mas,
                                                                     

 pues a la hora de votar el secesionismo que  el mismo Mas a promocionado con todos los medios a su alcance el votante como es lógico optará por el original (ERC) y no por la copia (C i U).
El parecido inicial con  el desarrollo de lo tristemente acontecido en Kosovo es la presencia de una gran autonomía, que para colmo de males en Cataluña se suma el uso en la Constitución del termino equívoco y que da lugar a interpretaciones peligrosas en el exterior de nacionalidad.

Una vez  que el grupo más enconadamente  secesionista ostente el gobierno autónomo y todo lo que ello lleva consigo  procederá a una declaración unilateral de independencia, cuestión esta que obligará a que el Estado  adopte las medidas  precisas, incluidas las de fuerza, que eviten la ruptura de la Unidad Nacional. Y ahí va a estar el problema, una situación tan buscada por los que serán presentados como víctimas ante la “comunidad internacional”.
Y que nadie  piense que  ningún estado ni organismo les reconocerá como Estado independiente. Recuérdese que tras la declaración unilateral de independencia de la provincia Serbia de Kosovo el 17 de Febrero del 2008, bajo supervisión e los EEUU y de la Unión Europea. Tras la declaración  de independencia Estados Unidos y sus aliados, la Unión Europea   La apoyaron, por el contrario Serbia, Rusia y sus aliados se opusieron a ella y España y gran parte de Iberoamérica mostraron  una posición contraria  al secesionismo.

El 8 de Octubre de 2008 la asamblea de la ONU aprobó a propuesta de Serbia   una resolución para preguntar a la Corte Internacional de Justicia de la Haya si la declaración de independencia de Kosovo fue compatible con el Derecho Internacional.
El 22 de Agosto de 2010 este tribunal comunicó su conclusión en la que  señalaba que la Declaración de Independencia no violó el derecho internacional ni la resolución 1244 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.


El caso catalán no tiene porqué ser distinto  y más cuando en el acto desarrollado en la oficina de la Generalidad en Madrid, y que fue  interrumpido por personas  que defendían la Unidad de España,  se encontraba un representante de la Embajada de los Estados Unidos, nos hemos enterado por el hecho de que su hija, también presente, resultó empujada muy levemente en los incidentes.
¿Qué hacía un representante de la legación diplomática de los Estados Unidos en un acto contrario a la Unidad de España?  ¿O es que  la postura de esta nación no es contraria a la secesión catalana?
Del mismo modo la Liga Norte italiana ha mostrado su apoyo sin fisuras a la independencia  de Cataluña, por otro lado  la legalidad internacional tendrá como punto de referencia las declaraciones de la Corte Internacional de Justicia de la Haya, es decir su fallo que consideró que la declaración unilateral de independencia de Kosovo no era contraria al derecho internacional.

Y sobre todo hay que tomar en consideración que la posición de EEUU va a ser la que marcará la opción del resto de los países occidentales y de la Unión E         uropea especialmente.
Para países tan “amigos” como Francia e Inglaterra la debilitación de España será un logro puesto que una España dividida perderá fuerza y  será más fácilmente controlable y dejará de ser una competidora en  ciertos campos económicos.

Como se puede ver la situación es delicada, sumamente peligrosa y difícil de afrontar si no se parte de criterios  firmes y claros.
Dado que  parece que tanto la acción como la inacción  produciría  efectos  perniciosos creo que lo mejor es aplicar las medidas  que sean precisas, aunque sean de fuerza ahora mismo contra cualquiera que ose  atacar a través de actos públicos, declaraciones o  ataque a los símbolos nacionales. Es mejor  ir  actuando ahora que no esperar a que la situación termine por anquilosarse tanto que  se haga inevitable una acción armada. Pero si ese momento de la actuación militar llega no ha de  temblar el pulso de aquel o aquellos que las deban tomar.

                                                                     


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